!Por Dios...Olguita querida
yo quiero medio roscón!,
con eso yo me conformo
hasta que pase el ciclón.
No me llama la atención
ni las galletas ni el ron,
ni los picos sin azúcar
ni las tortas de jamón.
!Ay...ay, ay, aya yaiiii
yo quiero medio roscón,
aunque me piquen las pulgas
aunque no caliente el sol.
Si me lo das te aseguro
que se me quita el calor,
los calambres de las piernas
la risita y el son son.
Medio roscón, si señor
con cafelico y sabor,
unos besitos de mas
y unas notas al compás.
Gracias mi niña bonita
yo sabia que al final.
tenias que complacer
a tu amado general.
Así vivimos en paz
así afirmamos sin mas,
que la vida es placentera
cuando hay roscones y sal.
María Asenet Arboleda Urrego
1 comentario:
este poema está muy lindo. Cómo para hacerle una canción ;-)
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