jueves, 21 de diciembre de 2006

VOLVER A VIVIR



Sabes que la piel se arruga
y que el cabello encanece,
que los días se hacen siglos
que la vida va sin prisa.

Que tu y yo somos eternos
en convicción y coraje,
y que el espíritu crece
porque el amor es gigante.

Que hay un punto de partida
Y una llegada inminente,
la meta es el desafío
para este feliz viaje.

Te invito a reanudar lo andado
revestidos de fragancias,
sin lo amarillo del tiempo
ni las tristezas de usanza.

Si se oxidan nuestros huesos
inspiraremos respeto,
yo me apoyare en tu hombro
no importa si el paso es lento,

Escucharemos juntitos
las gotas de lluvia inquietas,
el canto de los jilgueros
cuando la luz amanezca.

Tu me dirás que me amas
y yo tímida y ferviente,
disimularé la alegría
que me ruboriza siempre.

¡Quien diría que los años
aunque pasen inocentes,
conservan las ilusiones...!
¡Que los sueños no envejecen!

Que el caminar por la vida
es un evangelio vivo,
que guarda las enseñanzas
de los que vivieron siempre.

Con la frente siempre en alto
con el ánimo contento,
llenando los corazones
de amor, de luz, de progreso.
María Asenet Arboleda Urrego

No hay comentarios: