viernes, 16 de marzo de 2007

SUCESOS



Atravesando montañas he venido de muy lejos
me he tragado los tiempos reventándome los sesos,
he tumbado nubarrones, he roto cristales viejos
he dejado entre la piedras tropezones por montones.

Bebiendo agua en la quebrada he visto mis ilusiones
corriendo y saltando alto he huido de visiones,
he trepado árboles grandes, he degustado sus frutos
he dejado mi chamarra hecha trizas por los sustos.

Llorando a moco tendido he desahogado penas
me he sacudido el polvo y he cogido nuevas fuerzas,
he dado vuelta canelas, he silbado a pulmón suelto
he ganado a tragos largos competencias de conciencia.

Cantando canciones viejas he traído buenas nuevas
he divertido a mi gente, hasta he levantado muertes,
he bailado día y noche, he contado chistes verdes
me he burlado de mi misma, me he reído de mi suerte.

Durmiendo tranquilamente he visitado a San Pedro
he timbrado muchas veces, solo me han dado empujones,
he notado que ha sido en vano, he desistido al intento
he dado unas cuantas vueltas, he decidido encontrarme.

Acudiendo a los que saben he llegado a este aposento
me parece que ya es tarde, he revuelto algunos tiestos,
he conocido teoremas, he sabido de leyendas
he descubierto lecciones, he vuelto a cambiar de tema

Atravesando montañas he venido a conocerte
me he llenado la vida de sueños y de ilusiones,
he aprendido que un día me reiré con la muerte
he decidido que hoy, solo viviré por siempre.

María Asenet Arboleda Urrego

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